Naturaleza en El Port de la Selva
El Port de la Selva es uno de los rincones más auténticos de la Costa Brava, donde la naturaleza se muestra en estado puro. Rodeado por el Parque Natural del Cap de Creus, este pequeño pueblo de pescadores es un paraíso para los amantes del aire libre, la tranquilidad y los paisajes espectaculares.
Cap de Creus: un paisaje único en el Mediterráneo
El Port de la Selva forma parte del Parque Natural de Cap de Creus, el primer parque natural marítimo-terrestre de Cataluña. Aquí, los caminos se abren entre acantilados, calas escondidas, formaciones rocosas caprichosas y vegetación típica del litoral mediterráneo. El contraste entre el mar y la montaña crea un paisaje salvaje y a la vez delicado, perfecto para explorar a pie, en bicicleta o simplemente dejarse llevar por el silencio y la brisa.
Rutas de senderismo con vistas al mar
Desde el propio pueblo salen numerosas rutas de senderismo que permiten descubrir la zona a un ritmo pausado. Algunos de los caminos más populares son los que llevan hasta el Monasterio de Sant Pere de Rodes, con vistas panorámicas al golfo de Roses, o los que bordean la costa hasta calas tranquilas como Cala Tavallera o Cala Tamariua.
Cada sendero ofrece una experiencia diferente: caminatas suaves con vistas al mar, tramos entre viñas y olivares, o recorridos más exigentes para los aventureros. Todos, eso sí, comparten una misma recompensa: la belleza natural y la paz del entorno.
Playas y calas para desconectar
El litoral de El Port de la Selva está salpicado de playas y calas que conservan su carácter natural. Algunas de ellas son accesibles a pie o en coche, y otras requieren un poco de aventura para llegar, pero siempre merecen la pena. Lejos del bullicio, son lugares ideales para nadar, tomar el sol o simplemente escuchar el sonido del mar.
Un destino para respirar naturaleza
Alojarse en La Tina te sitúa a solo unos pasos de este paraíso natural. Ya sea para caminar por los senderos del Cap de Creus, descubrir pequeñas calas o contemplar la salida del sol desde el paseo marítimo, El Port de la Selva es un destino que invita a desconectar, respirar y reconectar con la naturaleza.